En una rueda de prensa tras más de diez horas de operativo, el gobernador de la provincia norteña de Chiang Rai, donde se encuentra el complejo de cuevas, Narongsak Osotthanakorn, confirmó que los chicos están bien y que se les están practicando estudios en un hospital, de acuerdo con lo publicado por el diario El Mundo.

Hace apenas horas, dos ambulancias salieron de los alrededores de la cueva en el norte de Tailandia, donde 12 jugadores de un equipo de fútbol juvenil están atrapados junto con su entrenador desde el 23 de junio.

Luego, las ambulancias fueron a un helipuerto cercano y de allí un helicóptero despegó. Las autoridades antes habían advertido que las aeronaves estaban dispuestas en el lugar llevar al hospital a los rescatados.

Trece buceadores extranjeros y cinco tailandeses participan en el rescate, y dos buzos acompañarán a cada niño durante la evacuación, que será gradual, explicó el gobernador sobre el operativo que comenzó a las 10 de la mañana local (medianoche argentina).

La única forma de sacar a los atrapados en la cueva de Tham Luang Nang Non, en la región de Chiang Rai, es a través de oscuros y estrechos pasadizos llenos de agua enlodada, fuertes corrientes y con poco oxígeno.

Sin embargo, el buen clima y el descenso del nivel del agua en los últimos días crearon condiciones óptimas para una evacuación submarina, que no se mantendrían por mucho tiempo si vuelve a llover.

Los chicos, de entre 11 y 16 años, y su entrenador de 25 años quedaron atrapados cuando fueron a explorar la cueva luego de un partido de entrenamiento. Las inundaciones provocadas por el monzón bloquearon la salida e impidieron que los socorristas los encontraran durante casi 10 días.