Después de más de tres horas de negociación, los gremios de los pilotos de Aerolíneas Argentinas y Austral no lograron un acuerdo salarial con el Gobierno, por lo que mantendrán el paro previsto para el sábado y domingo próximos.

A pesar del llamado a conciliación obligatoria que dispondría en las próximas horas la Secretaría de Trabajo, Pablo Biró, jefe de los pilotos de Apla, ratificó a LA NACION la medida de fuerza.

"La conciliación obligatoria está agotada. La de mayo fue por el mismo conflicto. Sería ilegal dictar otra conciliación. No hubo oferta de mejora salarial y nos están empujando al conflicto porque el Gobierno cree que le da rédito electoral", dijo Biró, un dirigente gremial alineado a la Corriente Federal, uno de los sectores disidentes a la conducción de la CGT.

El secretario de Trabajo, Lucas Fernández Aparicio, advirtió hoy en radio Continental que sancionarían económicamente al gremio en caso de incumplir la conciliación. "Ya lo hemos hecho con otros gremios", dijo el funcionario, en referencia al conflicto que mantuvo la gestión macrista con los camioneros de Hugo Moyano.

Biró desconoció un segundo pedido de Alberto Fernández para que levanten la huelga. "Está en campaña", dijo ayer el jefe de los pilotos, casi en un abierto desafío al candidato presidencial del Frente de Todos. Hoy, en cambio, evitó opinar sobre el tema.

Desde Aerolíneas Argentinas, en tanto, no dieron a conocer aún el detalle de la reprogramación de los vuelos ni tampoco sobre el curso de la reunión que hubo con los gremios en la sede laboral de la avenida Callao al 100.