Otro caso de gatillo fácil sacude Estados Unidos. Las autoridades de Chicago publicaron el jueves imágenes de cámaras corporales de la policía en las que se ve cómo un agente mata a tiros a un adolescente latino de 13 años en un callejón del barrio hispano de La Villita el 29 de marzo.

Tan solo 20 segundos separan el momento en que el agente Eric Stillman baja de su auto y el instante en que le dispara a Adam Toledo, la víctima más joven de la policía en años en Chicago.

Luego se escucha a Stillman pedir una ambulancia y un botiquín. “Mírame. Mírame. ¿Estás bien? ¿Dónde estás herido?”, le preguntó el agente a Toledo, que yacía inmóvil, con sangre en la cara y la remera.

El oficial le realizó luego maniobras de RCP. Toledo fue finalmente declarado muerto en el lugar.

Tras la publicación del video pequeños grupos se reunieron el jueves en el centro de Chicago para protestar pacíficamente por la muerte del adolescente. “íEncierren al policía!”, coreaban algunos, según medios locales.

“No creo que importe si Adam era un buen chico o si estaba involucrado en alguna actividad inapropiada, el hecho es que estaba caminando por la calle y le dispararon desarmado”, dijo a los periodistas Adeena Weiss-Ortiz, la abogada de la familia de Toledo.

“Las imágenes muestran que Toledo cumplió con las órdenes del oficial”, insistió.

Las tensiones sobre el racismo y las actuaciones policiales son elevadas en Estados Unidos. En la cercana ciudad de Minneapolis se está celebrando el juicio de un expolicía blanco acusado de asesinar al afroamericano George Floyd en mayo de 2020, un caso que desató una ola de protestas raciales en todo el país.

El domingo pasado, otro tiroteo mortal de la policía contra un un joven afroamericano desarmado, Daunte Wright, provocó violentas protestas en un suburbio de esa ciudad.