En los últimos movimientos antes del cierre de listas, Pablo Blanco, el hombre que pergeñó desde las sombras la candidatura de Ricardo Garramuño, hace los últimos intentos por sostener la candidatura del concejal, que pende de un hilo. Garramuño debió recurrir a Pablo Blanco para conseguir avales para su candidatura, que generó un importante rechazo en las filas del radicalismo y el PRO, por su acompañamiento a la gestión de La Cámpora en Ushuaia. "Ricky" ha tenido dificultad para conseguir compañera de fórmula en Río Grande, donde ya ha recibido varias negativas.

Como si fuera poco el MPF presentará candidato a diputado, por lo que Garramuño competirá con el partido del cual se fue. Los afiliados mopofistas vieron con indignación que el concejal (que consiguió su banca desde el mopofismo), se pasara al partido que destruyó la economía de Tierra del Fuego. Como si fuera poco, toda la cúpula "gorila" del PRO expresó su apoyo al antiperonista "Tito" Stefani: la inefable Patricia Bullrich, su primo Esteban Bullrich, Miguel Picchetto, María "Heidi" Vidal, y en las próximas horas se sumaría Horacio Larreta.

El sector de Blanco se comunicó también con autoridades nacionales para "asegurar" que Garramuño no es un "panqueque", aunque las votaciones y acompañamientos del pasado lo dejan en evidencia. También se intentó convencer a Fernando Gliubich de bajar su candidatura y apoyar a Garramuño, pero habría recibido desde este sector un rotundo "no", ya que se encontraría enfrentado al sector de Blanco y no confiarían en Garramuño a quien consideran "advenedizo"