El día viernes 25 de febrero en horas de la noche, personal policial de la Comisaria 1era de Ushuaia, acudió a un departamento del barrio 245 Viviendas, en donde una niña de 8 años de edad se encontraba inconsciente y con pulso muy debil, intentando ser reanimada con maniobras de resucitación cardiopulmonar por sus familiares.Inmediatamente se activó el protocolo para este tipo de casos, arribando minutos después al Dpto. 1, de la tira 14, efectivos bomberiles y agentes sanitarios del HRU, quienes continuaron con las prácticas resucitatorias mientras se la trasladaba a la guardia en una ambulancia.

La menor, identificada como Layla Eluney Cabrera, ingresó en estado desesperante a la sala de emergencia, en donde pese a que los médicos intentaron denodadamente estabilizarla, falleció poco después.

La investigación

En el domicilio de la niña se efectuaron tareas periciales que incluyeron el examen de cintas de tela, mediciones y tomas fotográficas mientras que la Justicia dispuso la realización de una autopsia. Con el correr de las horas se intentó la reconstrucción de los últimos minutos de la pequeña, quien se encontraba al cuidado de un familiar cuando ocurrió el trágico evento. Al arribar su madre al departamento la habría encontrado moribunda, pidiendo inmediatamente ayuda a través de una línea de emergencia.

Luego de realizadas las tareas investigativas de rigor y de que se descartara cualquier indicio de criminalidad en el hecho, el Juzgado autorizó la entrega del cuerpo de la infortunada nena a su familia para que realice los arreglos funerarios.

El día 1ero de marzo, los restos mortales de la menor, hija de la docente Nilda Cabrera Mercado, de 37 años de edad y de Luis Cabrera, de 33 años, fueron inhumados en el Cementerio Parque del Mar.

El lamentable suceso fue considerado accidental por la Justicia.